Su cocina es una cocina muy visual, sorprendente, divertida, mezclando sabores de siempre, con otros más arriesgados y con conocimientos de pastelería, el talón de aquiles de muchos cocineros. Se considera un chef que siempre quiere saber más, con una gran capacidad para improvisar con cualquier cosa, es capaz de crear un plato bonito y rico

En el 2014 ganó el concurso de Aragón de cocina y repostería Lorenzo Acín y al año siguiente le nombraron mejor cocinero joven de Aragón del año. En 2016 ganó el concurso internacional de aceite de oliva virgen extra de Jaén, el más importante de Madrid Fusión y fue segundo en el nacional del langostino de Vinaroz, así como finalista en unos cuantos concursos más.